Dani Martínez triunfa en un sorprendente Dauphiné

Por: Carlos Lizcano

Para el presente año y debido a los efectos de la pandemia que aqueja a todo el mundo, el Critérium Dauphiné sufrió un recorte de tres días, pasando de ser una carrera de ocho etapas a una de cinco; en donde básicamente se eliminaron las etapas planas y el ejercicio contra el reloj, para dejar una competencia plagada de montaña; de ellas tres con una muy alta dosis. Salvo contadas excepciones que prefirieron intentar dar la lucha en Lombardia, la mayoría de gallos que entrarán en disputa del Tour de France dentro de menos dos semanas se dieron cita en esta carrera para mostrarse los dientes: Bernal, Roglic, Pinot, Pogacar, Quintana, Thomas, Dumoulin, López, Yates, Landa, Buchmann, etc; una autentica constelación de estrellas como tal vez nunca se había visto en esta carrera desde su creación en 1947 bajo la denominación de Dauphiné Liberé.

El recorrido quebrado de la primera etapa con llegada en Saint Christo en Jarez dio la oportunidad para que los corredores de corte clasicómano fueran quienes definieran la llegada, sin que los favoritos lograran sacarse ventaja. Como ya lo hemos comentado en La Ciclopolémica, esta temporada inédita se ve marcada por el duelo entre las escuadras del Team Ineos y el Jumbo Visma. Y fue precisamente un corredor de los amarillos quien ganó el primer pulso: el sensacional Wout Van Aert se adjudicó la primera etapa y se vistió de líder, continuando con el predominio demostrado la semana pasada en el Tour de LÁin.

Luego vino la primera etapa de exigencia montañosa con llegada en Col de Porte cotizado como de Fuera de Categoría. Al inicio del ascenso quienes ponen condiciones al frente del lote son los integrantes del equipo Británico: Castroviejo es el primero en poner el paso, luego vienen Kwiatkowskwi y Thomas; para finalmente dejar a Sivakov como lugarteniente del líder de equipo Egan Bernal. Los Jumbo Visma van a la expectativa viendo cómo los soldados del Ineos van cayendo uno a uno. El actual campeón del Tour lanza un ataque que es controlado por el equipo Holandés y el desenlace es una repetición de lo visto la semana pasada: Roglic parte faltado poco más de medio kilómetro para la meta y conserva el liderato de la carrera para su equipo.

Luego tuvimos la tercera etapa, con un paso intermedio a 52 kilómetros de meta por el mítico alto de La Madeleine a 2.000 metros de altura sobre el nivel del mar. Una fuga de nueve corredores recibe salvoconducto del lote mayor y logran una ventaja superior a los siete minutos; de todos ellos el más fuerte es el italiano Davide Formolo (UAE Emirates) quien logra superar la rudeza del puerto de fuera de categoría y se enruta en busca de la victoria. El equipo líder de la carrera se contenta con poner un paso redondo en cabeza de Van Aert y Dumoulin, quienes evitan cualquier tipo de sublevación y de ésta manera Formolo se logra coronar victorioso en Saint Martin de Belleville con una ventaja de un poco más de medio minuto sobre el lote de los astros, encabezado por el mismo líder Roglic, seguido por Pinot y el joven Buchmann, quienes parecieran ser los que en algo le pueden aguantar el paso.

La etapa sabatina abre los ojos con las noticias de los retiros de Bernal y Buchmann, lo que parece facilitar en gran medida el trabajo por venir de los Jumbo Visma para asegurar la victoria de su jefe de filas. Ante este nuevo escenario, las condiciones se facilitan para que se presente una gruesa fuga de quince corredores, entre ellos varios reconocidos escapistas entre los que se destacan el rey de todos De Gendt, Luis León, Alaphippe y Kwiatkowskwi, entre otros. Al inicio del último ascenso de carrera hacia la meta en Megeve ya la etapa está escriturada para ser disputada entre los fugados; Elissonde es quien toma la iniciativa, luego lo intenta De la Cruz; pero es Lenard Kamna (Bora Hansgrohe) quien se alza con la victoria, con el lote líder llegando a tres minutos encabezado por Pinot quien por fin le gana un lance al líder Roglic quien se logra recuperar de una caída sufrida en el último descenso.

En tiempos de pandemia, pareciera como si estuviéramos viviendo en todos los aspectos de la vida un capítulo de “Los dioses deben estar locos”; y así ha sucedido con la última etapa de este Critérium du Dauphiné, empezando con el anuncio del retiro de la competencia de Primoz Roglic, debido a la caída sufrida en la etapa anterior; lo que ponía en el liderato al francés Thibaut Pinot (FDJ), pero con una carrera completamente abierta por la búsqueda del título de la clasificación general individual en una etapa con ocho premios de montaña, entre ellos, uno de categoría especial y otro de primera. Quienes toman la iniciativa son el mismo líder Pinot, Landa, Pogacar, Dumoulin y Sivakov que se destacan dentro de un lote puntero de más de quince ciclistas, que finalmente no logran aumentar diferencias gracias al trabajo de los Education First en la persecución. Ya en el ascenso al premio HC se unen los dos grupos y se produce un nuevo ataque de ocho corredores, ahora encabezados por Dumoulin, Pogacar, Sivakov y Alaphilippe; quienes también son controlados para iniciar el ascenso a la Colombiere y conformar ahora un grupo selecto con 23 fichas del que se adelantan Sivakov y Alaphilippe para coronar la cima.

Sivakov cae en el descenso; mientras en el lote persecutor la consigna es “Todos contra Pinot”. Martinez, López y Pogacar atacan y le llegan a los dos punteros y más tarde se les une Sepp Kuss del Jumbo Visma. El título de la competencia parece estar para ser definido entre los colombianos Martinez del EF y López del Astana; sin embargo, atrás Pinot parece revivir, en tanto que Superman desfallece en punta. Kuss ataca y se va por la victoria en la etapa, en tanto que Dani Martinez cada vez se siente más campeón mientras Pinot persigue de forma desesperada en busca de arrebatarle el título al colombiano. Al final, gana la etapa el norteamericano del equipo Jumbo Visma y Martinez arriba segundo en meta para convertirse en el sorpresivo campeón de esta versión frenética del Criterium du Dauphiné plagada de retiros de corredores que se ponen entre algodones para el inicio del Tour de France dentro de apenas trece días.

Por lo visto, y ante la corta preparación de cara a la Grand Bouclé, es muy probable que la versión de este año de la Ronda Gala esté llena de etapas sorpresivas y rendimientos llenos de irregularidades; pero eso será otra historia digna de escribirse con mucha más tinta.

Carlos Lizcano

La Ciclopolémica